ENTORNO
SELVA DE IRATI
La Selva de Irati es el segundo hayedo-abetal más extenso y mejor conservado de Europa, después de la Selva Negra de Alemania. Una inmensa mancha verde de unas 17.000 hectáreas que se mantiene en estado casi virgen. Se encuentra situada en el Pirineo oriental navarro, en una cuenca rodeada por montañas (Ori, Abodi...), en la cabecera de los pirenaicos valles de Aezkoa y Salazar.

La Selva de Irati es un tesoro natural con gran valor ecológico en el que conviven distintas figuras de protección como las reservas naturales de Mendilatz y Tristuibartea y la reserva integral de Lizardoia. Tupidos hayedos, pastizales, abetos y frescas aguas pintan un paisaje de colores vivos que se transforma con cada nueva estación.
Un bosque que le brindará multitud de sensaciones: el encuentro a solas con la naturaleza, el rumor salvaje del agua entre hayas y abetos, el frescor del río Irati o del embalse de Irabia, el sonido huidizo de los animales y de las hojas caídas en otoño, el olor a los frutos del bosque y la suavidad del manto de hierba que cubre esta joya de los Pirineos. Coja su cámara y sus botas de monte y échese a andar por alguno de los senderos balizados que recorren el bosque.

OCHAGAVÍA
Situada al norte del Valle de Salazar, a 764 metros de altitud, en la confluencia de los ríos Zatoia y Anduña, junto a la Selva de Irati, Ochagavía se nos presenta como uno de los pueblos más típicos del Pirineo Navarro. Lo caracterizan, su puente medieval, sus calles empedradas y sus cuidadas casas situadas a ambos lados del río.
Rodeada de milenarios bosques, ríos de aguas cristalinas y altas cumbres, Ochagavía es un lugar privilegiado desde donde disfrutar de las maravillas con que nos regala la Naturaleza...

Hablando de costumbres no podemos olvidar sus danzas, las danzas de Ochagavía están formadas por cuatro sugerentes y expresivas danzas de palos, además de una pañuelo danza y una jota. Los ocho danzantes, con el enmascarado personaje bifronte a la cabeza, el Bobo, celebran anualmente, cada 8 de septiembre, ante la ermita de la Virgen de Muskilda, situada a poco mas de un Km. de la villa de Ochagavía.

BiBA BOBO!!

VALLE SALAZAR
El valle de Salazar se enclava en el corazón del Pirineo navarro y ofrece una estampa con múltiples perspectivas. Pequeños pueblos de cuidada arquitectura remontan el río Salazar hasta llegar a Ochagavía, la localidad más pintoresca del valle.

Altas cumbres se asoman a la Selva de Irati, un extenso bosque que ofrece tantas sensaciones como colores en cada estación. Infinidad de senderos para perderse y ancestrales tradiciones, que los salacencos han cuidado con mimo, completan una rápida ojeada por este valle que invita a recorrerlo pausadamente.

PICO DE ORI
El monte Ori, el "dos mil" más occidental del Pirineo, se muestra imponente y esbelto al norte del valle de Salazar.
Su cumbre, a la que se accede en apenas una hora desde el aparcamiento situado en el alto de Larrau, ofrece unas excepcionales vistas sobre la Selva de Irati y los picos cercanos. Si el día está despejado podrá incluso contemplar el Moncayo o el mar Cantábrico.

Más difícil resultará toparse con los personajes que la mitología vasca atribuye a este lugar. Ori es el refugio de Mari, diosa de los genios de la naturaleza, y de Basajaun, el señor del bosque.

VALLE DE AEZKOA
Al abrigo de los Pirineos, el valle de Aezkoa es una extensa alfombra verde de más de 12.000 hectáreas de bosque que da cobijo a nueve municipios. Entre ellos se encuentra el más elevado de Navarra, Abaurrea Alta, el balcón de Aezkoa.

El principal atractivo de este valle es la selva de Irati, uno de los mayores bosques de hayedo-abetal de Europa. La naturaleza, hórreos Bienes de Interés Cultural -construcciones rurales tipo almacén cuyas características protegían el grano de roedores y humedades -, las cuevas escondidas, los dólmenes, las ermitas, las estelas... forman parte de las señas de identidad de este valle.

VALLE DEL RONCAL
Situado en pleno Pirineo, en la muga con Francia y Huesca, el Valle de Roncal ofrece una acusada personalidad forjada a base de tradiciones ancestrales, una sabrosa gastronomía y naturaleza en estado puro. Siete pueblos únicos componen este valle cuyos principales recursos son la explotación forestal, la ganadería y el turismo. Burgui, Vidángoz, Garde, Roncal, Urzainqui, Isaba y Uztárroz son las siete perlas de este valle.

El río Esca cruza el valle de norte a sur regando las orillas de sus pueblos empedrados con cuidados caseríos apiñados, tejados inclinados y humeantes chimeneas. Y sus aguas, que han construido impresionantes espectáculos naturales como la foz de Burgui, fueron surcadas durante siglos por los almadieros, a quienes se homenajea cada primavera.

VALLE DE BELAGOA
El Valle de Belagua es el ecosistema pirenaico más relevante del Valle de Roncal, con alturas que oscilan entre los 1.100 metros del denominado Rincón de Belagua y los 2.428 metros de la Mesa de los Tres Reyes, la cumbre más alta de Navarra.
Situado al norte del Valle de Roncal, en la muga de Navarra, Francia y Huesca, en su interior se encuentra la Reserva Natural de Larra, que acoge el más singular y representativo de los ecosistemas pirenaicos y constituye uno de los parajes morfológicos kársticos más impresionantes de Europa.

Al Valle de Belagua se accede desde Isaba por una carretera que conduce hasta la Piedra de San Martín, a más de 1.750 metros de altitud, y donde se celebra cada año el 13 de julio el tradicional Tributo de las Tres Vacas. En el camino quedan rincones, simas, reservas, montañas, pistas de esquí, barrancos, bosques, cascadas, flora, fauna: el frescor del Pirineo.
Casa rural besaro